Qué es un técnico competente

Escribo estas líneas después de leer un artículo donde informan de que una sociedad de tasación resulta condenada por por los perjuicios derivados de una sobre tasación de varios inmuebles. La sentencia declaró responsables a la sociedad de tasación, a su aseguradora  y al técnico de aquella que firmaba los certificados.
Y es aquí donde comienza mi reflexión, pensando en este técnico, que por motivos que desconozco, firmaba certificados que faltaban a la verdad. Seguramente sería considerado técnico competente para realizar su trabajo, pero a la vista de los resultados, algo ha fallado.

Haciendo una búsqueda rápida por internet del término “técnico competente” aparecen webs donde se trata de delimitar diferentes trabajos de responsabilidad a personas cualificadas para ello, trabajos como prevención de riesgos laborales, certificación energética, licencias de apertura, etc. Pero mas allá de tratar de repartirse un pastel, bastante mordisqueado de por sí, no aclaran mucho.

Bajo mi leal saber y entender, como suele indicarse tradicionalmente en el pie de firma, la figura del técnico competente, más allá de ser una figura necesaria, para asegurar que los trabajos de alta complejidad técnica se realicen por profesionales cualificados, tiene que cumplir un requisito fundamental, el de la ética profesional.

Y es que nos encontramos continuamente con trabajos y proyectos realizados por profesionales del sector (Arquitectos, Arquitectos técnicos, Ingenieros, Ingenieros Técnicos…) que juran y perjuran que son técnicos competentes, y se prestan a realizar servicios, que no solo rayan la ilegalidad, sino que la traspasan ampliamente.

Es por esto, que desde aquí hago un llamamiento a la cordura, es fundamental trabajar haciendo lo correcto, el objetivo de todo profesional no debe ser el económico, sino realizar una tarea digna, y si es posible, que mejore el mundo en que vivimos.